miércoles, 27 de febrero de 2013

Compañía...

Tengo que disculparme antes de comenzar porque he escuchado de algunos amigos que mi blog está muy emo. Me disculpo nuevamente, pero no me queda más decirles que esto va "de Guatemala a Guatepeor".

Ya superada esta etapa burocrática en este proceso de hacer llamados desesperados de atención, les quiero hablar de que no tengo novio. Alguna vez (no hace mucho, la verdad) no solo tuve novio sino prometido. Imagínense ustedes que alguien en este mundo tenía ganas de pasar el resto de su vida CONMIGO (inserte aquí risas un  poco macabras y desequilibradas).


Pero ustedes ya conocen el dicho: "mejor solo que mal acompañado".


Mi problema no es estar sola, sino que me siento poco acompañada

Adrián, mi hermano, es un ser, digamos, "especial". Yo cuento con él para muchas de las cosas que sí que son importantes. Emocionalmente, pues, no mucho. Muchas veces, su respuesta cuando le digo algo que siento o algo que me pasa es, literalmente, "hm, bueno, Martha, pero no seas estúpida" (insterte voz en eco para la palabra marcada en negritas).

I mean... WTF, bro?! de todas maneras... you know I love you... Idiot.


Mi madre, creo que es la única persona a la que no extraño en Venezuela. No, no la extraño y ni un poquito. ¿Quieren saber por qué digo con tanta confianza y desparpajo que no extraño a mi propia madre que me parió? Pues yo hablo con mi Mami todos los días. Hasta nos da chance de pelear. ¿No es tierno? Sin embargo, mi madre no está aquí para caerse a vinos conmigo, cantar canciones de desamor y luego ir a una discoteca a terminar de "acabar los trapos". Y ni que ella estuviera aquí saldría con ella a una discoteca a acabar los trapos (el que no haya entendido, caerme a vinos y cantar canciones de desamor sí estarían incluidos en el programa).


Zulay, digo, Mamite amo!!

Jeniffer, una amiga que tiene 6 años JURÁNDOME que este año sí va a viajar a Europa... Esa puta es una embarcadora. Pero con ella sí que me echaría la bendita rumba.

Biatch!!

Y muchas personas que me hacen falta, día a día, para sentirme acompañada. Mencioné a Jeniffer en particular porque tengo que aprovechar cada oportunidad que se me presente para joder a esa coño de madre

La verdad, sinceramente, sin que me quede nada por dentro, es que HOY COMIENZA LA CUENTA REGRESIVA!! 24 días, señoras y señores, para pasar dos semanas absoluta y completamente acompañada en VENEZUELA. Hasta el gato va a estar ahí. "¡Échenle bola!"

Jeniffer, el gato y yo... 

martes, 5 de febrero de 2013

Análisis...

Yo... sencillamente yo.


Soy Martha Kuhnle y nací en Caracas el 6 de diciembre de 1986. Mi padre era alemán. Era, porque murió hace 5 años. Por él tengo la nacionalidad alemana. Ahora vivo en Alemania, en Múnich. ¿Que si hablo alemán? Bueno, sí, pero no muy bien. Mi madre me apoya en todo lo que emprenda. Me apoyó cuando fuí la única de los cuatro hijos de mi padre que quiso estudiar Humanidades en la escuela. Me apoyó cuando decidí que mi prioridad era un hombre y que irme a España con él sin terminar mis estudios en Traducción era lo que más quería en este mundo. Me apoyó cuando decidí irme de España para Alemania y poder continuar estudiando, porque ya ese hombre no era mi prioridad. Me apoya financieramente. Ella está siempre allí. Mi hermano vive en la misma ciudad que yo y él es perfecto. Eso le molesta un poco, eso de ser perfecto. Al parecer, porque a pesar de tener una vida envidiable, quiere cambiarla por completo. Él está allí, a su manera, no tanto como yo quisiera, pero allí está si lo necesito.

Ahora, les invito a revisar el análisis de este discurso desde el punto de vista venezolano y desde el punto de vista alemán.

Lo que interpreta un venezolano:

Yo, en Venezuela.

Cungle, Culey? Eso suena extranjero. Ah, ¿viste?, yo sabía esa vaina. Coño, los alemanes son trabajadores, así que seguro tiene real. No, chamo, sin duda. ¡La jeva vive en las Alemanias y pa' eso uno necesita real! Además, mírala qué culta, ya la pana habla perfecto alemán.
Mieeerr... la suegra parece ser pana, porque yo a mi hija ni de coño la dejaría irse ni pa' la vuelta de la esquina sin que se case. Le voy a preguntar ahorita si la pana pidió CADIVI de estudiantes o si la están manteniendo chin-chin.
Al cuñao lo que le hace falta es una buena salidita con unas putas y unas tellas de güisqui pa' que deje de quejarse y se relaje.

Lo que interpreta un alemán:

Yo, en Alemania.

Martha Kuhnle, seguro está casada. ¿De qué otra forma una venezolana puede portar un apellido alemán si no es que le echó el lazo a un compatriota? Ach, so... El padre es alemán. Bueno, más de lo mismo, ¿no?
Sí, me dí cuenta. Cuando pensé que estaba hablando con Tarzán supe que no hablas muy bien alemán.
Esta es una loca hippie: le gustan los estudios humanísticos y abandonó los estudios -en traducción, ¿en serio?- para irse a otro país. ¿Acaso no tienen Erasmus estos venezolanos? Además no trabaja. Se le debe dificultar conseguir dónde vivir. ¿Qué considerará ella una vida perfecta? Porque los estándares están bien bajos.