martes, 5 de febrero de 2013

Análisis...

Yo... sencillamente yo.


Soy Martha Kuhnle y nací en Caracas el 6 de diciembre de 1986. Mi padre era alemán. Era, porque murió hace 5 años. Por él tengo la nacionalidad alemana. Ahora vivo en Alemania, en Múnich. ¿Que si hablo alemán? Bueno, sí, pero no muy bien. Mi madre me apoya en todo lo que emprenda. Me apoyó cuando fuí la única de los cuatro hijos de mi padre que quiso estudiar Humanidades en la escuela. Me apoyó cuando decidí que mi prioridad era un hombre y que irme a España con él sin terminar mis estudios en Traducción era lo que más quería en este mundo. Me apoyó cuando decidí irme de España para Alemania y poder continuar estudiando, porque ya ese hombre no era mi prioridad. Me apoya financieramente. Ella está siempre allí. Mi hermano vive en la misma ciudad que yo y él es perfecto. Eso le molesta un poco, eso de ser perfecto. Al parecer, porque a pesar de tener una vida envidiable, quiere cambiarla por completo. Él está allí, a su manera, no tanto como yo quisiera, pero allí está si lo necesito.

Ahora, les invito a revisar el análisis de este discurso desde el punto de vista venezolano y desde el punto de vista alemán.

Lo que interpreta un venezolano:

Yo, en Venezuela.

Cungle, Culey? Eso suena extranjero. Ah, ¿viste?, yo sabía esa vaina. Coño, los alemanes son trabajadores, así que seguro tiene real. No, chamo, sin duda. ¡La jeva vive en las Alemanias y pa' eso uno necesita real! Además, mírala qué culta, ya la pana habla perfecto alemán.
Mieeerr... la suegra parece ser pana, porque yo a mi hija ni de coño la dejaría irse ni pa' la vuelta de la esquina sin que se case. Le voy a preguntar ahorita si la pana pidió CADIVI de estudiantes o si la están manteniendo chin-chin.
Al cuñao lo que le hace falta es una buena salidita con unas putas y unas tellas de güisqui pa' que deje de quejarse y se relaje.

Lo que interpreta un alemán:

Yo, en Alemania.

Martha Kuhnle, seguro está casada. ¿De qué otra forma una venezolana puede portar un apellido alemán si no es que le echó el lazo a un compatriota? Ach, so... El padre es alemán. Bueno, más de lo mismo, ¿no?
Sí, me dí cuenta. Cuando pensé que estaba hablando con Tarzán supe que no hablas muy bien alemán.
Esta es una loca hippie: le gustan los estudios humanísticos y abandonó los estudios -en traducción, ¿en serio?- para irse a otro país. ¿Acaso no tienen Erasmus estos venezolanos? Además no trabaja. Se le debe dificultar conseguir dónde vivir. ¿Qué considerará ella una vida perfecta? Porque los estándares están bien bajos.

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